La vinculación por trauma y la perdurabilidad del abuso.



La vinculación es un proceso biológico, psicológico y emocional que hace que las relaciones entre las personas prosperen. Esto es bueno si las personas no son dañinas. Cuando una madre amamanta, cuando las personas se enamoran, liberamos oxitocina que es la hormona del vínculo y del buen apego. A diferencia del amor, la confianza o la atracción, el vínculo no es algo que se pierde. Es acumulativo, porque el vínculo crece con el paso del tiempo juntos, vivir juntos, comer juntos, hacer el amor juntos, tener hijos juntos y estar juntos durante el dolor o la dificultad. Los malos tiempos vinculan a las personas con tanta fuerza como los buenos, quizás más. Pero esta vinculación necesaria para la vida en sociedad, se vuelve peligrosa cuando nos relacionamos con personas abusivas, en especial con psicópatas o narcisistas, porque el vínculo creado tapa el abuso, es más, el vínculo es el abuso mismo. Este tipo de vinculación se la conoce como “vínculo por trauma”

El término “vinculo por trauma” fue desarrollado por Patrick Carnes, y describe el mal uso del miedo, las emociones, los sentimientos sexuales y la fisiología para enredar a otra persona. Esto no ocurre solamente en las relaciones románticas sino en las familias, en los grupos de amigos y laborales. Muchas personas tóxicas utilizan las emociones extremas, los ciclos de cercanía y lejanía, el bombardeo amoroso y el castigo para crear este vinculo traumático. Las personas psicópatas y narcisistas secretan niveles muy bajos de oxitocina por lo que no logran crear vínculos verdaderos y sanos con nadie. Su vida gira en torno al control de otras personas a través de la instauración de un vínculo traumático fisiológico. Esto lo logran subiendo los niveles de cortisol y adrenalina de sus víctimas (moléculas del estrés) a través de distintas técnicas de abuso encubierto de las cuales tienes bastante material en este blog, para luego, hacer que la dopamina y la serotonina (moléculas del bienestar) suban, a través de muestras de cariño fingido. Es decir, estas personas tóxicas te arruinan para luego levantarte en un ciclo eterno de abuso, en el que la víctima, sin entender lo que le sucede, puede desear recibir consuelo de la misma persona que abusa de ellos. Esto es terriblemente penoso en el caso de hijos de psicópatas y narcisistas.

Crecer en un hogar abusivo hace que las situaciones abusivas posteriores tengan más poder de retención en la relación, porque esto se convirtió en rutina y normalidad. Esto no quiere decir que sólo las personas que crecieron en hogares tóxicos son presa de estas personalidades siniestras, toda persona puede caer en un vínculo por trauma si no conoce los mecanismos por los que psicópatas y narcisistas juegan con los cerebros de la gente; pero sí puede hacer que las personas se queden más tiempo en este tipo de relación. Los niños no tienen las herramientas para detectar el abuso, por lo que crecen sabiendo que algo está mal, pero en vez de ver el problema en el afuera, piensan que ellos son el problema, aún de adultos. Quienes juzgan a alguien que le cuesta identificar que están en una relación abusiva no solo no entienden la magnitud del problema, sino que están actuando de co abusadores al responsabilizar a la víctima por la lentitud en reaccionar al abuso.

¿Cómo rompes el ciclo? Primero que nada, debes alejarte de esas personas y aplicar contacto cero o mínimo. Luego, entiende que por unos meses vas a tener desequilibrios en tus hormonas y neurotransmisores, están tratando de volver a sus niveles normales, en algunos casos se siente como un verdadero síntoma de abstinencia, en otros como cambios de humor extremos; debes tenerte paciencia, esto es lo primero que se supera, luego viene el trabajo de sanación profundo. Por último, puedes buscar ayuda en forma de terapia o de grupos de apoyo, también tienes mucho para leer al respecto. Dos excelentes libros específicos sobre los efectos del trauma (y su superación) son “El cuerpo lleva la cuenta” de Bessel van der Kolk y “Trauma y recuperación” de Judith Herman. También te recomendamos libros específicos sobre relaciones con psicópatas y narcisistas como “Amor Zero” del Dr. Piñuel (enfocado en las relaciones de pareja), “Madres que no saben amar” de Karyl McBride (si tu padre o madre es la persona abusiva), y “Serpientes de Traje” de los doctores Hare y Babiak (en los casos abusivos laborales)

ShivaShakti 2020

Comentarios

  1. Magnifico artículo! Una pregunta a la que, aún, no he encontrado respuesta: cuando una victima abre los ojos y se da cuenta de que su pareja es psicópata narcisista, cómo podemos ayudarla? Si los monos voladores son amigos? Es mejor alejarse? Si hay un hijo de por medio, cuál es el mejor co.portamoento para el pequeño? Muchas gracias!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No todas las amistades reaccionan como monos voladores, eso dependerá de que convincente sea el psicópata con sus mentiras, es importante tener un grupo de apoyo. Si la persona enredada con un psicópata es familiar o amiga, te recomendamos estar a su lado, brindándole información todo el tiempo, escuchando sus dudas, y haciéndole notar cuando está siendo manipulada ya que a veces los retrocesos son comunes al comienzo debido a la disonancia cognitiva. Cuando hay hijos de por medio, lo mejor es mantener un contacto mínimo con el psicópata y a los niños irles explicando cómo no dejarse manipular de acuerdo a su edad porque los/las psicópatas usan a sus hijos como rehenes o como munición contra su ex pareja por lo que intentarán manipularlos y lastimarlos también, hay que prepararlos para afrontar eso, con ejemplo simples de acuerdo a su edad

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

El sexo con un psicópata o narcisista.

Lo que no debes hacer con un psicópata o narcisista

Perspectivas para los hijos de padres narcisistas y psicópatas